DANA en Valencia, gestion operativa, comparación con otras inundaciones y sistemas de alerta
Las recientes inundaciones causadas por la DANA (Depresión Aislada en Niveles Altos) en la región de Valencia han puesto de relieve la necesidad de una planificación de respuesta rápida y coordinada para movilizar los recursos operativos en el menor tiempo posible. La presencia de equipos sobre el terreno es crucial, y la carga de responsabilidad en la coordinación resulta clave para gestionar eficazmente estas emergencias.
Cuando la magnitud de la situación desborda a los equipos locales, es necesario activar unidades especializadas de toda España, como equipos de rescate acuático, unidades caninas, y grupos USAR de búsqueda y rescate. Este tipo de movilización es parte de la rutina operativa de los servicios de emergencia, que están preparados para responder de manera ágil sin que la activación inmediata sobrecargue la labor de rescate.
La coordinación de estos operativos en eventos extraordinarios implica, sin embargo, una carga adicional difícil de manejar, que puede afectar el ritmo y la eficacia de la respuesta. Esto plantea una pregunta clave: ¿cómo podemos optimizar esta coordinación para mejorar la gestión en futuras emergencias?
La DANA en Valencia no es un caso aislado en Europa. Hace apenas tres años, las graves inundaciones en Alemania y Bélgica presentaron desafíos similares, y analizar sus conclusiones podría proporcionarnos claves valiosas para fortalecer nuestros sistemas de respuesta en el futuro.
INUNDACIONES 2021 EN BÉLGICA COORDINACIÓN Y RESPUESTA
Las inundaciones en Bélgica demostraron cómo, el conocimiento previo y la gestión de un evento de esta magnitud es importantísimo. El posterior analisis de lo ocurrido después de las inundaciones de 2021 en Bélgica les llevo a trabajar en 4 bloques:
- Respuesta local. Se trabajó en concienciar a la población local. Cuando la gente está concienciada y sabe cómo reaccionar, y entiende por qué se le dice de evacuar y reacciona mejor
- Reuniones entre expertos y autoridades: Las videoconferencias fueron la forma más eficaz de colaboración. El resultado fue la creación del CELEX (Cellule d'Expertise), que da un papel más activo a los expertos en la respuesta a las crisis. En cuanto el Instituto Meteorológico emite una alerta de código amarillo, por precipitaciones (o riesgo de incendios forestales), se puede convocar una reunión del CELEX. Se reúnen las autoridades implicadas, así como a los cuerpos de bomberos, hidrólogos, especialistas en presas y muchos más expertos, que reciben una previsión meteorológica en profundidad.
- Sistemas de alerta: El sistema de alerta a los moviles es una herramienta moderna muy útil. Pero también se llegó a la conclusión de que no informa a las personas sin teléfono móvil, y falla cuando la gente apaga sus teléfonos, por ejemplo cuando duermen por la noche. Tampoco tiene en cuenta la pérdida de cobertura.
- Trauma: Se ofreció apoyo psicológico a las víctimas como parte de seguridad social del municipio afectado. El seguimiento postraumático de una crisis puede durar varios año
INUNDACIONES DE 2021 EN ALEMANIA LA RECONSTRUCCIÓN
Las inundaciones de julio de 2021 en Renania (Westfalia) y Renania (Palatinado), causadas por fuertes lluvias, son una de las mayores catástrofes por inundaciones ocurridas en Alemania en décadas. Las regiones y municipios afectados se enfrentaron a enormes desafíos. El proyecto de investigación KAHR (Climate Adaptation, Flood, Resilience) aconpañó el proceso de reconstrucción. Se publicaron 10 recomendaciones desde la perspectiva de la ciencia sobre el tema de la reconstrucción y la sostenibilidad de las regiones afectadas por las inundaciones
- La reconstrucción tras las inundaciones de 2021 también ofrece la oportunidad de iniciar un proceso de transformación estratégica y reforzar la resistencia ante las catástrofes. Un pequeño ejemplo: NO instalar más sistemas de calefacción de gasóleo. Agravan los daños causados por las inundaciones y, de todos modos, son perjudiciales para el clima.
- Deben aprovecharse todas las posibilidades que ofrecen la modelización de inundaciones y el análisis de riesgos para planificar estrategias de protección y preparar y alertar a los afectados. Esto incluye también pensar en escenarios que antes se consideraban impensables:
- Más espacio para el río es importante, pero esto no sólo significa la retirada de los asentamientos, sino también la adaptación de los usos del suelo. Por ejemplo, en forma de campos deportivos y parques que puedan servir de llanuras de inundación.
- En el futuro, los puentes deben tenerse más en cuenta en las evaluaciones del riesgo de inundación. Por ejemplo, deben reforzarse para soportar las enormes presiones de las presas y las cargas de impacto provocadas por la gran acumulación de escombros y restos flotantes.
- Debe reforzarse la alerta temprana de inundaciones. Por ejemplo, deben revisarse y desarrollarse más los sistemas de alerta eficaces para que sigan funcionando incluso en caso de corte del suministro eléctrico.
- Debe reforzarse la función de señalización de los planes y la planificación. Los mapas de peligrosidad y riesgo de lluvias torrenciales deben ser accesibles al público.
- La planificación y la construcción resilientes a las inundaciones y al clima deben integrarse en todos los niveles de la ordenación territorial y tener en cuenta todas las facetas de los impactos del cambio climático.
- La reconstrucción sostenible tiene éxito cuando los actores establecen formas de cooperación y trabajan juntos inter-municipalmente. La financiación debe reforzar esta cooperación.
- Una preparación intensiva de la protección civil y de la gestión del agua para los fenómenos poco frecuentes de inundaciones y lluvias torrenciales mejora la gestión de estos fenómenos.
- Es necesario definir nuevas normas de protección y objetivos de protección para las infraestructuras críticas y sensibles, y aumentar la concienciación sobre el riesgo residual inevitable.
Las recomendaciones revisadas permiten identificar ciertas carencias que actualmente enfrentamos, y es probable que, tras el paso del desastre en Valencia, podamos extraer conclusiones adicionales de nuestra propia experiencia. Cada región cuenta con un sistema de respuesta ante catástrofes naturales adaptado a sus particularidades; sin embargo, la comparación entre ellos aporta una perspectiva valiosa. Examinar otros sistemas puede ofrecer claves importantes para mejorar nuestra capacidad de respuesta y adaptación.
TEMPORALIZAR UNA INUNDACIÓN
A nivel de mando y operativo, es esencial comprender en qué fase de la emergencia nos encontramos, así como las necesidades específicas de cada etapa. La naturaleza del desastre también determina las particularidades de las decisiones a tomar; en este caso, una inundación masiva y de gran alcance que afectó zonas urbanas de manera súbita, llegando en horario vespertino y nocturno.
Analizar las acciones necesarias en cada fase permite dividir las decisiones en grupos fácilmente identificables, facilitando una respuesta estructurada. A continuación, profundizaremos en cada uno de estos aspectos para abordar sus características específicas.
ENTENDIENDO LAS FASES DE UNA INUNDACIÓN
Las distintas fases de una inundación son esenciales para proteger tanto a la población como a la infraestructura local.
Fase 1.- PRE INUNDACIÓN: Durante la fase de pre-inundación, se activan los sistemas de monitoreo y alerta temprana, que permiten a las autoridades y a la población prepararse y reducir el riesgo de daños.
Fase 2.- INUNDACIÓN REPENTINA: Cuando ocurre la inundación repentina, el aumento abrupto del nivel del agua representa el momento más peligroso para la seguridad de las personas, será en esta fase cuando se realicen los rescates más complejos, siendo muy importantes también las evacuaciones rápidas y la asistencia inmediata en las zonas afectadas.
FAse 3.- MÁXIMO DESARROLLO: En la fase de máximo desarrollo, se produce el pico de la inundación, donde el caudal de agua alcanza su nivel más alto, y es vital mantener la seguridad en las áreas de mayor riesgo, el control de los sistemas de drenaje y evacuar a las personas que aun estando bien son victimas potenciales a largo plazo.
Fase 4.- RESTABLECIMIENTO: La fase de restablecimiento implica el descenso del agua y el inicio de las labores de búsqueda y recuperación
Pero estamos bien organizados para un evento de estas características? Vamos a hacer un análisis con el sistema británico que está acostumbrado a las lluvias y las inundaciones, y aunque no es perfecto es un camino más regularizado.
PLANIFICACIÓN RESPUESTA Y RECUPERACION EN EL REINO UNIDO
La normativa de gestión de inundaciones en el Reino Unido, especialmente bajo la dirección de la *DEFRA* (Department for Environment, Food & Rural Affairs), establece un marco sólido de planificación, respuesta y recuperación frente a las inundaciones que se alinea con las fases típicas de un evento de inundación. La comparación entre ambas permite observar las similitudes en la estructuración de respuesta y las diferencias en los enfoques de gestión y prevención, adaptadas a las características geográficas y climáticas de cada región.
PRE INUNDACIÓN / PREPARACIÓN
La fase de pre-inundación se centra en la alerta temprana y preparación de la comunidad ante un evento extremo inminente. En el Reino Unido, DEFRA da prioridad a esta fase a través del desarrollo de un sistema de monitoreo avanzado en coordinación con la *Environment Agency* (Agencia de Medio Ambiente), que emite alertas con anticipación para áreas propensas a inundaciones. DEFRA promueve también la implementación de infraestructura de defensa contra inundaciones, como diques y presas, así como el diseño de planes de zonificación que restringen construcciones en áreas de alto riesgo.
INUNDACIÓN REPENTINA / RESPUESTA INMEDIATA
Durante la fase de inundación repentina, el objetivo principal es la evacuación rápida y la intervención de equipos de emergencia en áreas de alto riesgo. De manera similar, el Reino Unido establece la movilización de cuerpos de emergencia para la evacuación y rescate. Sin embargo, el Reino Unido suele enfrentar inundaciones de respuesta más prolongada y progresiva, mientras que las inundaciones por DANA suelen ser de naturaleza extremadamente repentina, lo cual desafía a las autoridades a actuar aún más rápido. DEFRA, no obstante, sigue procedimientos de seguridad más estandarizados y equipamientos específicos para zonas frecuentemente inundadas, como sistemas de bombeo y personal especializado en rescate acuático.
MÁXIMO DESARROLLO / CONTENCIÓN
En la fase de máximo desarrollo, tanto en España como en el Reino Unido, el enfoque está en asegurar las áreas de alto riesgo y mitigar el impacto donde el nivel de agua es mayor. DEFRA coordina con la *Environment Agency* y cuerpos locales para monitorear constantemente los niveles de agua y reforzar puntos críticos en infraestructura de defensa, como diques y compuertas. La diferencia clave es que las infraestructuras de contención en el Reino Unido son más permanentes y robustas debido a la geografía del país y la recurrencia de lluvias, mientras que en el contexto de una DANA, las zonas afectadas en Valencia pueden necesitar refuerzos temporales o medidas de contención de emergencia que dependen más de la respuesta de equipos móviles.
RESTABLECIMIENTO / RECUPERACION
La fase de restablecimiento, cuando el nivel de agua desciende, implica un proceso de evaluación de daños, limpieza y restauración de servicios esenciales. DEFRA establece protocolos detallados para esta fase, facilitando el acceso a fondos de emergencia para los afectados y promoviendo la recuperación rápida de la infraestructura y los servicios básicos.
Se cuenta con planes de recuperación a largo plazo que incluyen la revisión de políticas de construcción y prevención para mitigar futuras inundaciones, una práctica que también se está fomentando en regiones afectadas por DANAs en España.
En resumen, aunque tanto Valencia como el Reino Unido siguen una estructura similar en la respuesta a inundaciones, el Reino Unido, bajo las directrices de DEFRA, cuenta con una infraestructura de defensa contra inundaciones más desarrollada y una normativa preventiva integral. En contraste, la respuesta en Valencia ante una DANA se enfoca más en la rapidez y la adaptación inmediata a fenómenos meteorológicos súbitos, aprovechando los sistemas de alerta temprana y la movilización de recursos de emergencia.
COMPARACIÓN DE LOS SISTEMAS DE ALERTA TEMPRANA EN ESPAÑA Y EN REINO UNIDO
El sistema de alerta de inundaciones en España y el Reino Unido presentan similitudes en cuanto a estructura, pero se diferencian en la aplicación y el enfoque, debido a las distintas características climáticas y geográficas de cada país. Ambos sistemas han desarrollado protocolos avanzados de monitoreo y alerta temprana, aunque adaptados a sus realidades específicas.
SISTEMA DE ALERTA EN ESPPAÑA
En España, la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) y la Confederación Hidrográfica son las instituciones principales responsables de monitorear fenómenos meteorológicos y fluviales, emitiendo alertas de acuerdo a diferentes niveles de riesgo: verde (sin riesgo), amarillo (riesgo bajo), naranja (riesgo importante) y rojo (riesgo extremo)
Estas alertas se emiten a través de varios canales como aplicaciones móviles, la web de AEMET, notificaciones a medios de comunicación y redes sociales, llegando tanto a las autoridades locales como a la ciudadanía. En eventos como la DANA, el sistema de alerta español se enfoca en advertir a la población y a los servicios de emergencia de manera anticipada, en especial en las áreas más vulnerables a la subida repentina de agua, ya que las DANAs pueden generar inundaciones de naturaleza súbita y localizada.
SISTEMA DE ALERTA EN REINO UNIDO
En el Reino Unido, el sistema de alerta es gestionado principalmente por la *Environment Agency* en Inglaterra y por organizaciones equivalentes en Escocia, Gales e Irlanda del Norte, en coordinación con DEFRA. Las alertas de inundación se clasifican en tres niveles: "Flood Alert" (alerta de posible inundación, se pide preparación), "Flood Warning" (advertencia de inundación, acciones inmediatas) y "Severe Flood Warning" (advertencia severa de inundación, riesgo extremo para vidas y propiedades). Esta clasificación permite una respuesta graduada y clara, de modo que tanto la población como los servicios de emergencia entiendan la gravedad de la situación y actúen en consecuencia.
Además, el Reino Unido utiliza tecnologías avanzadas de modelado hidrológico y previsión, que permiten emitir alertas con mayor antelación, especialmente útil en ríos que presentan crecidas más progresivas.
CONCLUSIÓN
Mientras que el sistema español clasifica las alertas en función de la severidad meteorológica general (verde a rojo), el Reino Unido clasifica las alertas en función directa del riesgo de inundación y su posible impacto inmediato. Esto hace que el sistema británico esté más centrado en el tipo de acción a tomar ante la amenaza de inundación específica.
Mas información:
Planes de gestión de los riesgos de inundación
FUENTES:
Department for Environment, Food & Rural Affairs
www.preventionweb.net
the brussels times