Rescate de vehículos en el agua

    El rescate de los vehículos en el agua es una maniobra de rescate muy común durante las inundaciones. Los vehículos atrapados en aguas en movimiento pueden presentar grandes riesgos no solo para sus ocupantes sino también para quienes realizan el rescate.

Afortunadamente, escuelas de rescate como RIVER GURU Rescue que proveen formación de rescate en aguas bravas, ha desarrollado los entrenamientos para conseguir unas prácticas muy realistas y controlados en esta área. Entrevistado por la revista Technical Rescue, nuestro maestro Paul O Sulivan cuenta; "Recuerdo que en 2004 trabajé con Martin Bills del Servicio de Bomberos y Rescate de Nottinghamshire y con Tim Rogers del Departamento de Bomberos de Charlotte en los EE. UU., en lo que probablemente fue el primer rescate de vehículos en el agua del Reino Unido en el Taller de Agua en el Curso Tees Barrage Whitewater. Desde entonces, muchos cientos de personas que respondieron asistieron a estos talleres y las lecciones aprendidas y las técnicas desarrolladas en estos cursos han tenido un buen uso en rescates reales."

   En este artículo, vamos a tratar una serie de aspectos clave en rescates de vehículos en el agua. Nos centraremos en los criterios de toma de decisiones que impulsarán la elección táctica en estos incidentes.

Consideraciones ante niveles de agua

   Dado que la velocidad del agua y la profundidad del agua son dos de los factores clave que determinarán si un vehículo en el agua se moverá, estas son consideraciones prioritarias cuando se realizan rescates para vehículos en el agua. En particular, debemos considerar la tendencia del nivel de agua actual y si es probable que aumente o disminuya.
Tan pronto como sea posible, debemos medir el nivel del agua, tanto en la escena de rescate, como en la ubicación de cualquier observador corriente arriba. Esto puede ser tan sencillo como clavar un palo en la orilla del río para marcar el nivel de agua actual. Si bien podemos anticipar aumentos y descensos del nivel del agua (producidos por precipitaciones recientes o deshielo, etc.) marcando el nivel del agua lo antes posible. De esta manera podemos determinar rápidamente si hay subidas o bajadas importantes del nivel del agua y actuar en consecuencia tomando decisiones basadas en las certezas y no impresiones.

   Por ejemplo, la situación de un coche dentro del agua, en una inundación. El coche todavia no se ha movido. Gracias a la información de nuestra medición, que podría decir de que el nivel de agua está bajando, confirmaríamos que el vehículo es poco probable que se mueva y puede reducir la prioridad de estabilizar el vehículo antes de ninguna maniobra, para llevar a cabo cualquier actividad de rescate más prioritaria

   Igualmente, frente al mismo escenario pero recibiendo la información inversa (los niveles de agua están aumentando), tendríamos la prioridad de estabilizar el vehículo, para evitar movimientos posteriores a medida que aumenta el nivel del agua.

   Entrenando a los equipos de primera respuesta, sobre la importancia de la medición del nivel del agua, podemos facilitar información muy interesante a las grupos especializadas en rescate en aguas a su llegada a la escena.

   Hay otros factores que afectan a vehículos en el agua: el peso y la flotabilidad efectivos de un vehículo, que a su vez pueden determinar si un vehículo flotará o se moverá, y se examinarán más adelante.

¿Los ocupantes están mojados?

   Como hemos visto anteriormente, tener algún conocimiento sobre los posibles cambios en el nivel del agua ayuda a determinar las prioridades y las acciones. Igualmente, la información sobre el estado de los ocupantes de los vehículos es de vital importancia.
Muchos factores como el  diseño del vehículo y la condición determinarán si los ocupantes todavía están bastante secos o si están sentados en agua fría. Si no tenemos preocupaciones sobre si el vehículo se moverá y los ocupantes están secos, podemos tener el tiempo para aplicar técnicas que permitan que los ocupantes sean retirados del vehículo sin mojarse, p.e. uso de trineos de agua y/o balsas. Sin embargo, si los ocupantes están sentados en agua fría y ya están mojados, quitarlos de los efectos de enfriamiento de esta agua es un factor crítico, especialmente si son ancianos o niños, o si hay consideraciones médicas.

Comportamiento del vehículo en agua

   No hay escasez de imágenes en YouTube, etc. mostrando a personas recibiendo la formación de Rescate de Vehículos en Agua de forma incorrecta. Sin embargo, estos videos confirman algunos de los aspectos clave del comportamiento del vehículo en el movimiento del agua, a saber:

En general, podemos dividir los rescates de los vehículos en el agua en dos categorías:

1) Aguas poco profundas de baja energía donde el vehículo no se ha movido: estas son muy comunes y los vehículos suelen ser accesibles utilizando técnicas de vadeo en aguas poco profundas.
2) Aguas con mayor energía, donde el vehículo ya se ha movido (y posiblemente rodado). Estos pueden presentar problemas de rescate mucho más complejos debido a la mayor cantidad de energía en el agua, el daño potencial al vehículo y la posibilidad de que el vehículo esté atrapado contra un objeto que restringe el acceso y/o la salida del vehículo.

Flotando  y/o en movimiento

   Una de las consideraciones clave para cualquier persona que se enfrente a emprender un rescate desde un vehículo en el agua es si el vehículo está en movimiento/flotando. En caso de que no ¿podría ser que comience a  flotar en un futoro cercano o durante el rescate?
La diferencia entre el peso del vehículo, (su contenido más los ocupantes) y la fuerza de flotación creada por el vehículo determinará si el vehículo flota. De manera similar, si la fuerza del agua en movimiento que actúa sobre el vehículo es mayor, que la fuerza de fricción que ejerce el vehículo sobre la superficie en la que descansa, entonces el vehículo comenzará a moverse influido por el agua que fluye.

   Por lo tanto, dependiendo de la velocidad del agua y la profundidad, un vehículo podría permanecer in situ, podría flotar sin ser arrastrado, podría moverse flotando o podría moverse río abajo sin flotar.

   También debemos recordar que nuestras acciones para acceder a los ocupantes de los vehículos tienen resultados adicionales. Por ejemplo, abrir una puerta, permitirá que el agua entre en el vehículo reduciendo la flotabilidad del vehículo reduciendo también la capacidad de ser arrastrado por el agua, pero también causará que los ocupantes secos se mojen, con todos sus problemas asociados.  Efectos de enfriamiento y contaminación.

Extracción de ocupantes

   La masa de cualquier persona dentro o sobre el vehículo contribuye al peso total del vehículo. Los ocupantes y los factores que dan flotabilidad al vehículo determinan si el vehículo flotará o será movido por las fuerzas del agua en movimiento.
Por lo tanto, a medida que extraemos personas del vehículo y reducimos su masa efectiva, podemos aumentar las posibilidades de el vehículo comience a moverse. Dependiendo del número, la antiguedad y el estado de los vehículos, los rescatistas pueden encontrarse considerando problemas tales como:

1. ¿Podemos mover a los ocupantes del vehículo y colocarlos en el techo como un punto de estacionamiento para mantener la masa y luego quitar todo del techo al mismo tiempo?
2. Con varias personas para rescatar... ¿debemos asegurar el vehículo para evitar movimientos a medida que los ocupantes son retirados del vehículo?
3. ¿Cuándo y dónde colocamos los Dispositivos de Flotación Personal (DPF) a los ocupantes?

Planificación previa para Rescates de Vehículos en Agua

   Es común que los incidentes de vehículos en el agua ocurran repetidamente en los mismos lugares. Ejemplos de tales "puntos calientes" incluyen vados (pasos de coches por el río), secciones de carreteras adyacentes a canales fluviales y pasos de altura en el mar. Una vez identificados, los rescates de estos puntos críticos se pueden planificar previamente y se puede registrar la información de riesgo de rescates anteriores y utilizarla para informar las respuestas futuras. Ejemplos de aspectos que vale la pena considerar son:

1. Nivel del agua - Ser capaz de controlar el nivel actual del agua comparado con el nivel del agua en los últimos incidentes. Esto ayudará para tomar decisiones sobre la táctica a seguir P.e.¿Podemos caminar para salir del coche con el nivel de agua actual?  Además de proporcionar información sobre peligros ocultos bajo el agua, por ejemplo, desagües, puertas y barreras y peligros aguas abajo.

2. Acceso a las 2 orillas: La planificación previa puede resaltar la necesidad de enviar recursos a ambos lados de un canal o río, particularmente en lugares como los vados de los ríos (zonas de paso). Esto puede garantizar una distancia menor al vehículo varado y puede ayudar a facilitar la estabilización del mismo. También facilitará el desarrollo de rescates basados en 2 orillas generalmente más eficaces y menos arriesgados. Sistemas como por ejemplo, "Diagonal en tensión" y/o "Telferd".

3. Uso de otros activos especializados: Puede ser una técnica más viable (y más fácil) retirar el vehículo del agua con los ocupantes que permanecen dentro del vehículo. Si este tipo de rescate es aplicable en un lugar determinado, se podría hacer un acuerdo con las compañías de recuperación de vehículos, para mediante una llamada a los servicios de emergencia, se activase automáticamente una alarma que alertase a la compañía de recuperación. Aun asi el rescate seguiría requiriendo de un equipo especializado de rescate de agua, para llevar el cable del cabrestante al vehículo atrapado, pero los vehículos de la compañía de recuperación son probablemente más adaptados a la recuperación de vehículos en el agua.

Bobliografía

Technical Rescue issue 72